
La amenaza del Picudo Rojo
Desde su detección en Uruguay en 2022, el picudo rojo se ha convertido en una plaga que sigue poniendo en riesgo la salud y la belleza de las palmeras en el país. Se estima que la población de este insecto es elevada, lo que genera gran preocupación entre expertos, autoridades ambientales y la comunidad en general.
Este insecto, que probablemente llegó a Uruguay por vía marítima, ha causado daños en diversas especies de palmeras, incluyendo las canarias del ornato público en localidades como José Pedro Varela. Allí, varias palmeras muestran síntomas de ataque, que podrían ser tanto del picudo rojo como del picudo negro autóctono, según informó el zoólogo Carlos Prigioni a El Observador.
Las medidas preventivas, como la vacunación de las palmeras, han resultado insuficientes para detener la propagación del insecto. Además, la remoción de los troncos de palmeras muertas representa un costo elevado, estimado en unos 70.000 pesos uruguayos por ejemplar, dificultando aún más la gestión del problema.
Ante esta situación, expertos y autoridades trabajan en la búsqueda de soluciones efectivas para controlar la plaga. La Sociedad Uruguaya de Paisajistas y Afines (SUPYA) ha señalado que los troncos de palmeras muertas constituyen un riesgo para la ciudadanía, por lo que la atención y acción coordinada son urgentes para proteger el patrimonio arbóreo del país.
En este contexto, el vivero Jardín de la Costa está realizando monitoreos en Ciudad de la Costa para seguir el avance del insecto y contribuir a contener la plaga, además de registrar su impacto en la zona.
La lucha contra el picudo rojo continúa, y la colaboración de toda la comunidad es fundamental para preservar las palmeras y el entorno urbano de Uruguay.